9.6.06

Reciclar


Hay que reciclar. Nos lo recuerda nuestro ayuntamiento cada año y poco a poco parece ser que vamos tomando conciencia. Guardamos botellas y botes de cristal, latas, tetrabricks, periódicos, el rollo de papel higiénico cuando se termina....En fin, hacemos todo lo posible y lo que nuestra pequeña y humilde cocina nos permite almacenar.
Y pienso que tal vez deberíamos tener otro contenedor, uno que lleve tatuada la palabra: Emociones.
En él meteríamos los momentos de tristeza, de incertidumbre, de dolor, incluso algún que otro momento de felicidad, y luego los reciclaríamos.
Sería como renovarnos por dentro, una segunda (o tercera o cuarta o quinta...qué más da) oportunidad, como volver a empezar aprendiendo de los errores.
Tal vez me anime a mandar una carta a la administración pidiendo la colocación de uno de esos contenedores en cada esquina. Mientras espero, haré un huequecito en mi cajón de la ropa interior (ahí guardo lo que más quiero) e iré almacenando emociones que reciclaré para levantarme más fuerte y poder continuar.

2 comentarios:

Miguel Angel Peláez dijo...

¡¡Perfecto!!
Estoy seguro que el "publico" añadiría muchos más contenedores...
De momento, yo aplaudo tu iniciativa: plasss, plasss, plasss...

el santo job dijo...

Ahora mismo le envio la carta al alcalde. Me gusta mucho la idea. Yo las guardaré en una lata de plástico debajo del somier. Y luego... al container.
Precisoso blog, seguiré visitando.
Un abrazo!