Belleza

No sé muy bien por qué, pero cada vez que veo una película de los '50 me enamoro de sus mujeres.

Mujeres de belleza enigmática, felina o de una sencillez encantadora.
Siempre elegantes, con un bonito andar, vestidos peciosos y peinados siempre perfectos.
Mujeres que pongas lo que les pongas, saben llevarlo, saben lucirlo, y seducen con una simple mirada.
No hace mucho veia "La ventana indiscreta" del magnífico Alfred Hitchcock, y no cabe duda de que Grace Kelly es toda una belleza frente a la cámara. Con ese aire inocente, delicado (cuesta creer que sus hijas sean tan distintas), una mujer preciosa sin más.
Pero como cambia la percepción de las cosas dependiendo del momento, el ejemplo más claro lo tuve este pasado fin de semana.
Estaba viendo "Mogambo" de John Ford y, aunque ya la habia visto en otras ocasiones, caí rendida al ver a Ava Gardner.
Qué belleza, qué manera de llenar la pantalla, de brillar oscureciendo a cualquiera que se ponga a su lado.
Así que la pobre rubia de mirada inocente, la pobre Grace Kelly pasó a parecerme una chica sosa y sin gracia, una muñequita que nada podía hacer al lado de la deslumbrante Ava.
Creo que en ese momento ni la mismísima Audrey Hepburn le habría hecho sombra.